¿Qué situación desagradable para Charlene de Mónaco y su marido Alberto. En una de sus raras entrevistas de TV se puede ver claramente que la princesa durante mucho tiempo no siente en su nuevo papel. La entrevista tuvo que ser interrumpido incluso para ella. Un año después de la boda del Príncipe Alberto y Charlene es clara, 34-Jährige aún es cómo increíblemente peligroso.
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Durante la entrevista con la televisión estadounidense "CBS", en realidad se hicieron todos los arreglos, que se siente Charlene. La reunión tuvo lugar en la pareja real en casa en lugar de ello, la televisión fue tan pequeña como sea posible y el entrevistador era tranquilo y simpático.
Sin embargo, fue notoriamente sesgada, bloqueada y tímida princesa. ¿Princesa Charlene: Por qué ocultarlas su sex appeal? Charlene con una voz agradable, profunda, tratada de responder a las preguntas del reportero, esto pone mucho y hablaba muy lentamente. Constantemente ella remolcado en su traje alrededor, y Albert Miró a menudo pidiendo a su esposa. Tuve la sensación de que estaba todo el tiempo que teme que su esposa se siente incómodo y atornillado hasta la entrevista.
Sobre la cuestión de cómo se siente, ser una princesa, no sabía a Charlene lo que deben decir y cayó con la falta de comunicación en una situación desagradable. En este punto, su marido interrumpió incluso la entrevista. Alberto y Charlene: en Berlín demuestran su amor De lo contrario, Charlene fue incompleta. El periodista quiso saber de ella lo que es para estar casado. "Grandes".
"Puedo lo recomiendo sólo", fue la respuesta de la belleza amplia. Immerwieder apareció en las sencillas preguntas ("Cómo es vida matrimonial?") a ser desagradablemente sorprendido, movido por encima de las cejas, miradas molesta al suelo ("Charlene es a menudo comparada con Grace Kelly..."), o se reía conjunto ("lo que es particularmente en Charlene?"). Sobre la cuestión de lo que supongo que a Albert la mayoría a su esposa, este muro es literalmente su asiento y el príncipe decidió no dar ninguna respuesta. Con esta entrevista, Alberto de Mónaco y su esposa Charlene no han unido Lamentablemente ningún favor. Lo contrario parece agradable, encantador, ingenioso y seguro.
